Tuvo lugar en la Academia Dominicana de la Lengua la puesta en circulación de la obra Domingo Moreno Jimenes o la glorificación de lo minúsculo, de León David, pseudónimo del eminente escritor y destacado académico de la lengua Juan José Jimenes Sabater.
La presentación de la obra contó con la intervención de los académicos Manuel Núñez Asencio, Bruno Rosario Candelier, Juan José Jimenes Sabater y Rafael Peralta Romero. Germán Venegas Aybar interpretó canciones inspiradas en la poesía de Domingo Moreno Jimenes, y María Aybar leyó un poema de su autoría. Ambos interpretaron algunas canciones centradas en la poesía de Moreno Jimenes y Jimenes Sabater.
León David, pseudónimo del escritor Juan José Jimenes Sabater, académico de la lengua, poeta, narrador y crítico literario, celebró la puesta en circulación de su más reciente creación literaria, Domingo Moreno Jimenes o la glorificación de lo minúsculo.
Previo al acto literario, Germán Venegas Aybar interpretó canciones sobre poemas de Domingo Moreno Jimenes: “El guanal”, “La niña pola” y “Desasimiento”.
Manuel Núñez Asencio inició la parte literaria con la presentación de la obra crítica de León David sobre Domingo Moreno Jimenes. Explicó el académico de la lengua que utilizó tres aspectos que sirven como lazarillos para acercarnos a esta obra: “La primera estación de este periplo la constituye el comparatismo”, por lo que destacó que la figura de Moreno Jimenes se parangona con todo el pasado literario que le precede, mencionando autores de la talla de Salomé Ureña, Gastón Fernando Deligne y Osvaldo Bazil, entre otros. Explicó que el enfoque comparatista se ocupa esencialmente por extraer de cada uno de los autores reunidos los rasgos que el poeta Moreno Jimenes rechaza o que, por contraste, han penetrado en su ámbito poético a título de legado.
El segundo punto de este recorrido aparece estampado en el bagaje crítico. Comentó que León David escoge las observaciones realizadas por una pléyade de escritores para ponderar la poesía de Moreno Jimenes. Y el tercer punto que destacó fue la definición de sus dotes estilísticas, señalando el empleo de un lenguaje llano, sin florituras, de gran sequedad pero de hondura conceptual: “Había en Moreno Jimenes talante metafísico, capacidad simbólica y un ritmo interior”, subrayó el presentador.
En su presentación de la obra, Núñez Asencio manifestó que León David nos dice que la poesía de Moreno Jimenes se define como el fluir de la conciencia sustentado en las tramoyas del sentimiento. Adujo que León David comunica en este ensayo el concepto de que en Moreno Jimenes no solo había gesto sino contenido. Felicitó al notable académico por haber escrito una magnífica interpretación de la lírica del vate postumista, “en la que impregnado de su prosa contagiosa, metido en el laberinto de sus cavilaciones, hemos redescubierto al poeta Domingo Moreno Jimenes”, dijo al finalizar su intervención.
El director de la ADL, Bruno Rosario Candelier, manifestó que normalmente cuando se presenta una obra, se suele hablar de la obra y del autor: “En este caso particular hay que agregar un personaje muy importante, que es el escritor de quien se habla en esta obra y en este caso es Domingo Moreno Jimenes”.
Comenzó ponderando el alcance, la significación y el sentido de Domingo Moreno Jimenes, que es el centro de esta creación, de nuestra inquietud y de todo lo que ha significado para el desarrollo de la literatura dominicana. Contó que conoció a Domingo Moreno Jimenes el año 1964 en la Librería Dominicana, época en la que Moreno Jimenes era el gran patriarca de las letras dominicanas, y que para los escritores de su generación su nombre era determinante por un detalle que lamentablemente en este momento no se puede exaltar, como era la existencia de los suplementos literarios que salían los sábados o los domingos: “Cuando se habla de los grandes creadores, es decir, de los escritores que han sido esenciales para articular un pensamiento literario y articular una orientación estética con el trasfondo de una creación, el nombre de Domingo Moreno Jimenes ha sido fundamental por la significación que encarnó, por el aporte que hizo a través de sus palabras y por todo lo que significó como creador de una poesía inspirada en los más ideales estéticos y espirituales de la época en que vivió”, expresó el escritor.
Abordó la grandeza y la significación de Domingo Moreno Jimenes, que es justamente lo que se ha propuesto desentrañar León David en este libro titulado Domingo Moreno Jimenes con el hermoso subtitulo de O la glorificación de lo minúsculo: “León David habla de “la glorificación de lo minúsculo”, porque asumió esa vertiente temática, estética, espiritual que para Moreno Jimenes fue de alta significación por el hecho de que él comenzó desde abajo, desde esa posición humilde, desde esa vinculación con la realidad social más llana de nuestro pueblo y la realidad telúrica más nutridora de nuestro ambiente para lograr el sentido de lo nacional”, recalcó Rosario Candelier.
Dijo que el autor de este libro toma en cuenta todo lo que se ha escrito sobre Moreno Jimenes, le pone atención a cada interpretación, porque ha habido posiciones contrapuestas y cuestiónales, pero él las asume todas y las reconoce todas con la validez que tienen. Explicó que cuando se trata de escritores que le ponen atención al aporte creador hay que valorar todas esas dimensiones, toda la perspectiva que un autor pueda enfocar para presentar una dimensión completo, abierta y objetiva.
En su intervención, el director de los académicos puntualizó: “Hay tres razones que fundan la categoría literaria de Domingo Moreno Jimenes y que prácticamente todos los analistas le han puesto atención. En primer lugar figura la posición criollista; en segundo lugar, su ruptura con el molde tradicional para empalmar la novedad expresiva; y, en tercer lugar, la dimensión metafísica, vertiente de alta espiritualidad de quien asume la palabra, la realidad y los fenómenos trascendentes para captar de las múltiples y ricas manifestaciones de la realidad la dimensión interna, esencial, profunda y metafísica de las cosas”, enumeró el académico. Al ponderar la onda metafísica, tanto de Moreno Jimenes como de León David, comenté: “Con el añoso y encumbrado aire de su decir retórico y clásico, la diestra pluma de nuestro enjundioso analista escancia en la fragua de la llama sutil la onda de muy antiguas esencias cuando el creador de la Colina Sacra, bajo el vórtice de la experiencia metafísica y el inusitado estremecimiento de fulgores, abreva el néctar puro de los dioses en su expresión genuina, límpida y sacra, como lo evidencia en el siguiente enunciado: “Solo un temperamento refractario al deliquio que enciende en el alma la palabra honda, sustantiva y espléndida, solo la insufrible incuria del ignaro incurriría en el atrevimiento de poner en duda el blasón lírico de los fragmentos recién copiados, entresacados de la inigualada y en no escasos aspectos inigualable composición “El poema de la hija reintegrada” (LeónDavidDomingoMorenoJimenes72).
Tras felicitar a Juan José Jimenes Sabater por esta obra, el Dr. Bruno Rosario Candelier agradeció en nombre de la Academia Dominicana de la Lengua lo que él ha hecho con la palabra, desde la palabra y por la palabra a favor del desarrollo espiritual de nuestro pueblo: “Muchísimas gracias, León David, por este grandioso aporte y que Dios te diga iluminando para que sigas creando a favor de nuestras letras”, dijo con entusiasmo tras finalizar su intervención. Germán Venegas Aybar y su madre María Aybar interpretaron el poema “Renacer”, de la autoría de León David, que fue musicalizado y cantado por ambos artistas.
León David agradeció a la Academia Dominicana de la Lengua, y comentó: “Conocí a Domingo Moreno Jimenes cuando yo era un muchacho de 15 o 16 años. Me impresionó, cuando lo conocí era un anciano, pero un anciano maravillosamente juvenil. Me glorío ser pariente de Moreno Jimenes. Era un gran amigo de mi padre”, relató el también poeta.
León David contó que Moreno Jimenes fue el primero que lo alentó cuando él hacía intento de poesía en esa época, y fue a él el primero que le gustaron sus poemas en ese entonces. Manifestó que Domingo Moreno Jimenes y él tuvieron una entrañable amistad. La actividad cultural concluyó con la lectura de un poema de León David, que escribió siendo un jovencito: “De un poeta joven a otro viejo, carta lirica a D. Moreno Jimenes”.
Juan José Jimenes Sabater es poeta, narrador, dramaturgo, ensayista, crítico literario y animador cultural. Hijo de padres dominicanos, nació en La Habana, Cuba, en 1945, y se licenció en Letras por la Universidad de los Andes (Mérida, Venezuela). Con el pseudónimo de León David, este destacado creador dominicano es un teórico de la creación poética, cuya lírica tiene una elevada onda metafísica, y su narrativa se inspira en la filosofía taoísta. Ostenta una fecunda trayectoria literaria y un valioso aporte que lo ha consagrado como uno de los autores fundamentales de las letras dominicanas. Miembro de número de la Academia Dominicana de la Lengua, su obra afina estética y espiritualmente con los más elevados ideales de la conciencia humana. Dirigió la Escuela de Arte Dramático, adscrita a la Dirección General de Bellas Artes, y el Departamento de Letras y de Extensión Cultural de la UASD. Diplomático adscrito al Ministerio de Relaciones Exteriores, fue embajador en Argentina y Paraguay. Ha sido profesor de literatura y ha dictado conferencias en el país y el extranjero. Publicó los poemarios Poemas del hombre anodino, Poemas del hombre nuevo, Trovas del tiempo añejo, Intento de bandera, Adentro, Guirnalda y Carmina; los relatos Narraciones truculentas, Parábola de la verdad sencilla, El hombre que descubrió la verdad; en teatro El sueño de Arlequín, La noche de los escombros; y en ensayo Huellas sobre la arena, Artes plásticas dominicanas y Una aproximación a la pintura metafísica de Jaime Colson. Como teórico de la literatura publicó El lenguaje de la poesía y Cálamo currente. Y entre sus obras de crítica literaria sobresalen Domingo Moreno Jimenes o la glorificación de lo minúsculo y Delmira Agustini o el otro nombre de la pasión.
Santo Domingo, ADL, 25 de agosto de 2017.