Presentación del poemario "Soliloquio de los días"de Camelia Michel

La poeta Camelia Michel presentó su poemario Soliloquio de los días, actividad celebrada con los auspicios de la Academia Dominicana de la Lengua y la Biblioteca “Juan Bosch”, de Funglode. Aída Montero manifestó que la puesta en circulación del poemario de la poeta dominicana es fruto del Taller de Creación Literaria que imparte el director de la Academia Dominicana de la Lengua y presidente del Ateneo Insular. Ponderó que en las jornadas literarias los participantes acrecientan su vocación por el arte y la literatura y dijo que los interesados en la creación literaria están bajo la orientación de Bruno Rosario Candelier y cada día se pone de manifiesto la consolidación de ese grupo de estudio y reflexión, como lo evidencia la presentación de esta obra de Camelia Michel.

La poeta Jennet Tineo disertó sobre “La sublimación del verbo: De lo cotidiano a lo sagrado en la poesía de Camelia Michel”. La joven escritora resaltó que en el poemario de la poeta dominicana descubrimos una poesía vital, hecha de fuego, de agua, de aire, de tierra, lo que se manifiesta en una creación que asume el escenario de la vida en su expresión rutinaria y normal para plantear su visión del mundo, visión que nos impulsa a valorar lo sagrado. La autora logra transportarnos a la levedad de lo sublime, mediante la fuerza de la voluntad y el impacto del dolor, a una atmósfera creada de metáforas, transformando la conexión de la persona lírica con el alma de las cosas, en un oasis de poesía, música, danza y sueño, sin dejar de lado el arrebato, las pasiones y la angustia.

También explicó que la poeta hace uso de imágenes arquetípicas femeninas que invaden nuestro inconsciente, porque se quedan en el banco de la memoria, en su profundidad y relevancia sobre ese flujo colectivo del que somos parte. Dijo que la poeta explora la esencia de las cosas y vemos a la poeta multiplicarse en voces, como pólvora en el fuego de los dioses, mediante la sabiduría ancestral que embriaga al lector de una forma plácida.

Por su parte, Bruno Rosario Candelier manifestó que este es uno de los primeros libros que se han escrito bajo la motivación de las ideas expuestas en el Taller de Creación Literaria. Explicó que muchas veces la vocación creadora requiere de un determinado estímulo por el hecho de que algunos creadores no tienen la convicción de que efectivamente cuentan con el talento para la creación. Señaló que al hablar de poesía, tenemos que instalarnos en el nivel de la palabra, en el fuero del lenguaje que hace posible la realidad estética. Señaló que la poesía se nutre de vivencias, pero al mismo tiempo se interna en otro estadio, porque crea una nueva realidad, en la que intervienen muchos factores, principios y estilos, como interactivos intelectuales y estéticos que atizan la creación, y algunos de los principios que explicó en las diferentes sesiones de docencia, de alguna manera han sido plasmados en esta obra de Camelia Michel, y eso es un aspecto que subrayó con énfasis. También enfatizó la disposición de la sensibilidad para acopiar una compenetración emocional, intelectual y espiritual de la persona lírica con la cosa, de la creadora con la realidad circundante, con el mundo de sensaciones y emociones para que haya una cabal identificación con la sustancia de la creación, que la palabra certifica en la expresión, según evidencian sus poemas.

La poeta y autora de Soliloquio de los días, Camelia Michel, confesó que este libro surgió en medio de su tráfago existencial, como una búsqueda de expresión en su labor como periodista y profesional del análisis informativo, experiencia laboral y circunstancia vital que la conectaron con el lenguaje de lo objetivo y lo racional, con los acontecimientos cotidianos y colectivos. Entonces comenzaron los poemas a surgir como una erupción de emociones, sensaciones y conceptos. La poeta retomaba un profundo sentido lírico, presente de sus días de niñez, cuando descubrió los placeres de la poesía y el arte. Recalcó que los hados la han favorecido con espléndidos regalos, como el afecto y solidaridad de su familia y de amigos entrañables, como Bruno Rosario Candelier, cuyo aporte en las letras nacionales nos enorgullece a los dominicanos.  Destacó la solidaria presencia de los poetas interioristas y los compañeros del Taller de Creación Literaria “Pedro Mir”, unidos en una búsqueda estética y simbólica. La poeta leyó su poema titulado “Voces”, que esboza el proceso interior, metafísico y estético, que la ha conducido por el camino de la creatividad.

Santo Domingo, ADL/Funglode, 16 de abril de 2014.

Isabel Marín diserta sobre el lenguaje de El Greco

La profesora española y especialista en temas históricos, artísticos y geográficos, doctora Isabel Marín, disertó en la Academia Dominicana de la Lengua sobre “El lenguaje de ´El Greco´”, con motivo de la celebración del IV centenario del nacimiento del destacado pintor hispano-griego.

Isabel Marín justificó la pertinencia de compartir estos conocimientos en torno a El Greco y sus obras, puesto que en este mes de abril se cumplen 400 años de su muerte en Toledo. Tras consignar la contextualización histórica del pintor, destacó los altibajos en la valoración de su persona y su obra. El Greco es considerado en la actualidad como el mejor pintor español del Renacimiento, y esta valoración viene avalada por el descubrimiento y la investigación de una cantidad importante de escritos del pintor, en los que evalúa a los pintores de su tiempo y manifiesta su postura estética en aspectos como el color, la composición y la anatomía de la obra pictórica.

Enfocó la disertante el recorrido teórico y práctico de El Greco por sus tres etapas como artista: Creta (Cadia, 1541 a Venecia 1567), donde se forma como pintor de iconos; en Venecia, Italia (1567-1570) donde conoce y admira a Tiziano, del que toma la riqueza de colores y tonos. Estudia la pintura de Tintoretto, del que asume la escenografía arquitectónica, el movimiento y la destreza compositiva. Manifestó que Roma es meta ilusionante para El Greco, pero allí no encuentra mecenas que le apoyen.

Relató la charlista que en Roma El Greco hace amistad con Luis de Castilla, hijo del deán de la Catedral de Toledo, quien lo anima a que vaya a España para participar en la decoración de El Escorial (1577-1614). Es la etapa decisoria en la configuración de un estilo diferencial. Presenta su pintura a Felipe II, El sueño de Felipe II, conocido también como Adoración del santo nombre de Jesús y actualmente como La liga santa. Reúne tales novedades en luz, color e imaginación interpretativa del tema. El monarca español le encarga para El Escorial un cuadro con el tema El martirio de San Mauricio. El Greco se establece en Toledo.

La destacada profesora española relató que allí trabaja con gran éxito y es reconocido por la sociedad toledana. Son muchos los encargos que recibió del clero y la aristocracia. Su técnica evolucionó, mientras circunscribe la temática a escenas religiosas y retratos. A este periodo corresponden obras magistrales como El Expolio, La Trinidad, La adoración de los pastores, La Virgen y Jesús con la cruz a cuestas.  Punto y aparte es El entierro del conde de Orgaz, por la originalidad y la riqueza de personajes que introduce: desde Felipe II,  el párroco de Santo Tomé y su hijo Jorge Manuel, hasta santos de los siglos V y XIII. Trata con pinceladas largas y sueltas algunas partes del cuadro y con delicadeza y minuciosidad, otras. Son múltiples las representaciones de santos, individualmente o en pareja, de cuerpo entero o busto.  Y sin duda son excepcionales sus retratos: El caballero con la mano en el pecho, Retrato de un anciano, o la Dama de armiño, consignó la expositora. La profesora Marín destacó que El Greco es considerado precursor e inspirador de los pintores de las vanguardias por su indiscutible originalidad.

Al ponderar la significación pictórica del afamado pintor, Isabel Marín subrayó: “En la actualidad es creciente la admiración que despierta entre pintores y público. Y esta alta valoración viene avalada por el descubrimiento y la investigación de numerosos escritos del artista hasta hace poco desconocidos, en los que critica a los pintores de su tiempo y deja claro cuál es su postura en aspectos como el color, la composición, la anatomía, etc. Se trata, sobre todo, de anotaciones que hacía en los márgenes de tratados sobre arte. Todo ello indica que El Greco era un teórico de la pintura, además de un artista en el más amplio sentido del vocablo. La originalidad compositiva de sus cuadros, el alargamiento de las figuras, el simbolismo del color, son realidades pensadas y queridas por él”.

El famoso pintor, durante los primeros años de su estancia en Toledo, participaba en tertulias y en actos sociales y culturales, algunos de cuyos asistentes le encargaban retratos y pinturas, como El entierro del conde de Orgaz, que era un atractivo para los espectadores. Con razón Manuel Cossío señaló el carácter cultural que tenían los encuentros en el Cigarral de Buenavista y el ambiente literario que rodeaba al Greco en una ciudad donde santa Teresa fundaba conventos, Cervantes ilustraba La ilustre fregona, Lope de Vega concurría a certámenes poéticos y Antonio de Covarrubias, entre otros, eran retratados por el pintor, según consigna Manuel B. Cossío en El Greco (Madrid, Espasa-Calpe, Colección Austral, no. 500, 1983, 4° ed. pp. 108-109).

Al agradecer la disertación de la española, el director de la ADL significó que El Greco ha sido considerado el pintor de los poetas y puntualizó que el reconocido artista se valió de la palabra para explicar el sentido de su pintura. De ahí la justificación de un tema sobre El Greco en un escenario como el de una Academia de la lengua. Y a sus imágenes pictóricas supo imprimirle la forma estética que canalizó su visión mística del mundo. Contemporáneo de Miguel de Cervantes, Luis de Góngora y Lope de Vega, Kyriakos Theotokópoulos o Domingo Teotocópulos, mejor conocido como El Greco, expresa en su obra pictórica el alma de las personas y sugiere el aliento interior de cosas y personas mediante el peculiar colorido de los contornos, por lo cual logra comunicar la tormenta interior de la conciencia en su anhelo de proyectar el sentido de la espiritualidad.

Santo Domingo, 14 de abril de 2014.

 

Presentan "Diccionario del español dominicano" en Puerto Rico

Con el auspicio de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española (APL), la Academia Dominicana de la Lengua presentó el Diccionario del español dominicano, que expone la creatividad lingüística de la República Dominicana. El libro se dio a conocer en San Juan de Puerto Rico, país donde reside una de las mayores colonias de ciudadanos dominicanos radicados en el exterior.

El acto tuvo lugar en la sede de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española, ante la presencia de dominicanos y puertorriqueños que, atentos y entusiastas, prestaron atención a las palabras de los expositores sobre el glosario de voces y expresiones usadas en el español de la República Dominicana. Enfatizamos en este encuentro que la importancia del Diccionario del español dominicano no radica solo en que contiene unas 11.000 entradas, 22.000 acepciones y más de 8000 ejemplos, concentrados en 800 páginas, sino en la calidad de su presentación y la precisión de sus definiciones.

Los doctores José Luis Vega y Bruno Rosario Candelier, directores de la APL y la ADL, respectivamente, presidieron la actividad cultural que contó con una masiva concurrencia de académicos, intelectuales, escritores, artistas, profesores boricuas y dominicanos residentes en la vecina isla. El director puertorriqueño dijo que esta obra sobre el léxico vivo del pueblo dominicano “contribuye al estudio y a la puesta en valor de la modalidad del español que hablamos en el Caribe, lo que constituye uno de los objetivos fundamentales de esta Academia”. Ponderó también la maestría en la confección de este singular código lexicográfico sobre nuestro lenguaje y la significación de la obra para los estudios lexicográficos en las Antillas y en América.

La obra registra las palabras y las acepciones del vocabulario habitual en el español dominicano como expresión de la variante antillana de la lengua española en América. Palabras como tíguere, mangú, echadías o expresiones como amolando y siempre boto, andar pianito o tirar pa´bajo son solo algunos de los ejemplos que incluye este diccionario y que fueron comentadas en el acto académico. Incluye citas de obras de autores dominicanos, así como de páginas electrónicas, revistas criollas, periódicos o ejemplos redactados por el equipo de colaboradores, entre los cuales figuran Fabio Guzmán Ariza, Pedro Caba Ramos y Roberto Guzmán. La obra fue coordinada por la lexicógrafa y académica María José Rincón y supervisada por el lingüista y escritor Bruno Rosario Candelier.

Los colaboradores que participaron en la redacción del diccionario son miembros correspondientes de la Academia Dominicana de la Lengua; y tres lectoras españolas, María Dolores Jiménez, Teresa Melián y Yolanda Garisoain, laboraron en la selección de vocablos y citas en los textos de autores dominicanos. La dominicana Ruth Ruiz laboró en la revisión final de la redacción.

La presentación de la obra lexicográfica en Puerto Rico estuvo a cargo de Fabio Guzmán Ariza, Maia Sherwood Droz y Bruno Rosario Candelier. Fabio Guzmán preside la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua y Maia Sherwood integra la Comisión de Lexicografía de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española, de la cual es miembro de número. El director de la academia anfitrión hizo de maestro de ceremonias al término de sus palabras de introducción.

En sus palabras de ponderación, José Luis Vega enfocó la necesidad del estudio y la puesta en valor de la variedad del español que hablamos en las Antillas y del potencial de trabajo en conjunto de las academias antillanas. Subrayó que la confección de este diccionario enaltece a la Academia Dominicana de la Lengua y es un aporte de nuestra institución a la obra lexicográfica en las Antillas.

Este diccionario constituye “la obra más emblemática y relevante publicada por la Academia Dominicana de la Lengua desde su fundación en 1927”, consignó el presidente de la Fundación Guzmán Ariza pro Academia Dominicana de la Lengua, en su intervención en la Academia boricua. Y añadió: “Quiero mostrarles una serie de particularidades del español dominicano: acreencia, es un crédito; bembe: ustedes lo reconocen como coloquial, aunque no es estrictamente dominicana, ya que se dice bembe en Puerto Rico. Chin es un dominicanismo emblemático; otro dominicanismo es lo que estamos haciendo aquí, un conversatorio, vocablo que no pertenece al español estándar. Escogencia es un invento nuestro, por decir selección. Experticio, medalaganario, vaporizo son palabras nuevas, que no existen sino en el lenguaje nuestro o en el lenguaje de nuestros compañeros americanos”.

Por su parte, Maia Sherwood enfocó la dimensión lexicográfica de la confección del diccionario.  La lingüista boricua ponderó el hecho de que ciertamente dominicanos y puertorriqueños compartimos muchas voces en esta área antillana del Caribe hispánico. A mi sugerencia de que las tres Academias (Cubana, Puertorriqueña y Dominicana) trabajemos en la elaboración de un diccionario antillano, la joven estudiosa de nuestra lengua ponderó la importancia de esa idea y comentó que está asombrada de la cantidad de voces que ambas naciones, República Dominicana y Puerto Rico, comparten. En su comentario sobre los aspectos técnicos del diccionario, valoró el enfoque de la macro y la microestructura del DED y significó que esta obra es una aportación muy valiosa a la lexicografía caribeña hispánica, puesto que da una idea de la red léxica compartida (y por lo tanto de la visión del mundo), que nos une en un nivel tal vez más profundo de lo que advertíamos hasta ahora. Al respecto consignó que “es además un gran regalo a la lexicografía puertorriqueña porque justamente salva una laguna que existía. Es un diccionario del uso actual de español dominicano, un diccionario descriptivo que se ocupa de describir el vocabulario dominicano y caracterizarlo sin someterlo a ningún tipo de evaluación valorativa, juicio de incorrección o corrección, un diccionario diferencial que presenta el léxico con un contraste de lo que podíamos llamar el español general y lo más valioso para mí es que nos permite encontrar esos puntos en común”.

En sus palabras de presentación, Bruno Rosario Candelier reconoció la ejemplar labor de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española en el estudio de nuestro lenguaje y dijo que la APL es un ejemplo para la ADL y para todas las instituciones que procuran el desarrollo del lenguaje de sus respectivos países, al tiempo que agradeció al director puertorriqueño el apoyo por la convocatoria de dominicanos y puertorriqueños al acto lingüístico en la Academia boricua.

El director de la ADL explicó el origen histórico y social de algunos vocablos, como calié, lámina y pariguayo, así como el uso de composiciones como conchoprimo y medalaganario. Ponderó la identificación emocional y espiritual de los dominicanos con su lenguaje, así como el aporte léxico y semántico al español hablado en América.  “El diccionario le dio cabida a las palabras que usan los dominicanos y que son distinguibles de la lengua general que comprende las voces y las expresiones de los hablantes del mundo hispánico”, detalló el académico y crítico dominicano para quien es importante destacar que “la lengua no es propiedad de las academias sino de los hablantes”, subrayó el director de la ADL.

El acto académico se efectuó en la sede de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española, ubicada en el Cuartel de Ballajá del Viejo San Juan.

San Juan de Puerto Rico, ADL/APL, 10 de abril de 2014.

 

Recital de la poeta y académica Conny Palacios

La Academia Dominicana de la Lengua presentó un recital de poesía con la poeta y académica Conny Palacios, de la Academia Nicaragüense de la Lengua. Esta destacada poeta, narradora y ensayista fue la invitada especial de la velada poética en la que el director de esta Academia presentó la dimensión estética y metafísica de la obra de la agraciada intelectual centroamericana.

En su presentación, Bruno Rosario Candelier contó que tuvo la dicha de conocer a Conny Palacios en un congreso de literatura celebrado en San José de Costa Rica y luego de interactuar con ella y conocer su creación poética se dio cuenta de que estaba ante una de las grandes creadoras de poesía en América. También destacó que la obra poética de Conny Palacios es de alta calidad estética con una hondura metafísica y mística como consecuencia de la sensibilidad espiritual que distingue a la poeta americana. Subrayó que esta valiosa creadora usa la palabra como vehículo de expresión del caudal de resonancias cósmicas que fluyen a través de su sensibilidad.

Subrayó Rosario Candelier que la poeta nicaragüense goza de un singular privilegio como persona ya que desde su sensibilidad tiene la capacidad para establecer un vínculo con la Potencia espiritual del Universo, atributo propio de excelsos creadores de poesía.

En su lírica emplea la palabra como cauce de irradiaciones cósmicas y místicas que fluyen a través de su sensibilidad, don que le permite profundizar en el poder del Logos. De esa manera, recordó que el eminente crítico alemán Werner Jaeger, en su admirable obra Paideia, estudia la cultura griega y el impacto intelectual y espiritual que significó la sabiduría helénica para la cultura de Occidente desde la concepción del Logos en Heráclito, que para un creador que asume la palabra como puente hacia el infinito, se manifiesta en una actividad creadora como la que realiza Conny Palacios con despliegue imaginativo y belleza sutil. “Lo grande de su creación es su lenguaje sencillo a cuyo través hay un despliegue de resonancias interiores y de irradiaciones metafísicas y místicas, pues ella tiene el poder para hacer de la palabra una creación espiritual y estética, al tiempo que es también un canal de la energía infinita y de la sabiduría espiritual del Universo, pues ella es una fuente del amor sagrado. En la mayoría de sus poemas habla del Amado para referirse a la Potencia suprema del Cosmos y encarna ese potencial creador que hace posible a través de la palabra en cuya belleza proyecta la grandeza espiritual de su alma luminosa”, precisé en la ocasión.

Se trata, en efecto, de una autora que con el don de la palabra y el talento poético plasma su percepción del mundo a través de su sensibilidad caudalosa y empática que le permite entrar en relación con todo lo existente, sentir la variedad sensorial de lo viviente y captar la dimensión espiritual de las manifestaciones físicas de las cosas y, sobre todo, percibir y plasmar los efluvios de la Creación, porque tiene un poder una percepción especial. Quien dispone de una sensibilidad como la de Conny Palacios, no tiene más remedio que ser poeta, no puede sino canalizar a través de la palabra poética lo que horada el hondón de su intimidad y lo que penetra en el espíritu en una persona vinculada con la esencia de lo viviente y con la energía fecunda y luminosa del mundo.

La poesía de Conny Palacios revela una singular conexión con lo viviente, indicativa de una consustanciación con fenómenos y cosas. Por eso, en “Sé que he sido”, escribió la académica y poeta: “Sé que he sido árbol/ piedra / pez/ lluvia / pájaro /viento /y creo saber lo que soy ahora…/Sin embargo /me pregunto, / ¿bajo qué vestidura se saciará/ el desgarramiento de esta sed? (Radiografía del silencio, p. 57).
Al cierre de la actividad, el Dr. Bruno Rosario Candelier le entregó un diploma de reconocimiento a Conny Palacios en nombre de la Academia Dominicana de la Lengua, por su valiosa obra literaria de inspiración mística, su encomiable aporte al desarrollo lingüístico y literario y su defensa de los altos valores del espíritu.

Conny Palacios nació en Matagalpa, Nicaragua, en 1953. Es poeta, narradora, crítica literaria y catedrática. Licenciada en Artes por la Universidad Saint Thomas de Miami y doctora en lengua española con especialidad en poesía hispanoamericana. Su tesis doctoral, Pluralidad de máscaras en la lírica de Pablo Antonio Cuadra, que explora la búsqueda del ser a la luz de la lírica, fue publicada en 1996 por la Academia Nicaragüense de la Lengua. Autora de la novela En carne viva y de los poemarios Exorcismo del absurdo, Percepción fractal, Radiografía del silencio y Poemas que muerden.

Santo Domingo, 24 de marzo de 2014.

Presentan Diccionario del español dominicano en Miami

La Academia Dominicana de la Lengua (ADL) dio a conocer el nuevo Diccionario del español dominicano a la comunidad dominicana radicada en Miami, ciudad del Estado de la Florida, de los Estados Unidos de América. La edición, que contó con los auspicios de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua, se presentó en la Universidad de Miami ante la entusiasta presencia de profesionales y estudiosos de la lengua española, así como varios integrantes de la colonia dominicana radicada en Miami y sus alrededores. La actividad fue organizada por el lingüista y académico dominicano Roberto Guzmán, radicado en Miami Beach.

El Diccionario del español dominicano recoge unos 11 mil vocablos nacionales y fue presentado en la República Dominicana en noviembre del pasado año. Los asistentes al encuentro cultural escucharon los planteamientos de los académicos dominicanos Fabio Guzmán Ariza, María José Rincón, Roberto Guzmán y Bruno Rosario Candelier, integrantes del equipo lexicográfico de la ADL y redactores del diccionario.

Fabio Guzmán Ariza ponderó el contenido del diccionario y el proceso de su elaboración y publicación, con la cantidad de entradas (11000), acepciones y locuciones (18250) y voces particulares que incluye 1300 relacionadas con nuestra flora y fauna, 400 con el béisbol, 200 con las peleas de gallos y 400 extranjerismos. Subrayó el letrado y lingüista que el diccionario es “la obra más emblemática y relevante publicada por la Academia Dominicana de la Lengua desde su fundación en 1927”, ya que su contenido identifica y define al pueblo dominicano.

Por su parte, María José Rincón afirmó que si hay un material de estudio inagotable en la lengua ese es el vocabulario, vertiente compleja del lenguaje porque está en constante cambio y en permanente migración de una persona a otra; si hay una lengua rica en vocabulario esa es la lengua española, que tiene quinientos millones de hablantes en una amplia extensión geográfica y es la lengua materna de más de veintiún países en el mundo. Esa característica propia de la lengua española hace que sea un campo de trabajo inagotable para hacer un diccionario, como lo hemos constatado en el español dominicano al ejecutar esta tarea lexicográfica. En su disertación, nuestra lexicógrafa consignó: “La palabra canoa, aunque procede de la Española, ya es del español general, pero fue un vocablo original del español dominicano, pues nació en la isla de Quisqueya, y esa palabra aparece en 1495 en el diccionario de Nebrija porque en tres años le dio tiempo al lingüista sevillano incluirlo en su diccionario por lo cual es el primer americanismo que aparece en un diccionario del español. Esa canoa que navega en las páginas de Nebrija en el 1495, y cacique, que también es del español general y también nació en nuestra isla, también aparece en las páginas de Covarrubias, de manera que esos dos vocablos son los dos primeros americanismos que aparecen en nuestro diccionario: canoa y cacique”.

Por su parte, Roberto Guzmán señaló que están incluidos en este libro los vocablos que son propios del habla de los dominicanos, así como aquellos que se comparten con otros países. “Este rasgo le imprime más valor y mayor amplitud al susodicho diccionario. No faltan en este los préstamos con las derivaciones populares, los cambios de sentido, las metáforas peyorativas y las renovaciones léxicas por composición”, dijo nuestro académico y lingüista.

En sus palabras de presentación del Diccionario del español dominicano, el director de la ADL subrayó: “Si la lengua general amerita la confección de un diccionario académico, mucho más lo requiere la existencia de las variantes regionales o locales de una lengua cuyo léxico es conocido por sus habituales usuarios, pero casi siempre ignorado por los hablantes de otras comarcas, regiones o países. Este diccionario, por tanto, recoge la variedad del español dominicano”. Y más adelante precisó: “Cuando los escritores descienden al alma del pueblo para expresar sus intuiciones y vivencias, lo hace con el léxico que usan sus hablantes naturales, con las palabras que conocieron cuando niños, como lo expresa el poeta Juan Antonio Alix en la composición “Mis creencias”, donde alude al hecho de no creer “que el maco es peje”; o como Alfredo Fernández Simó, que curcutea en las raíces de nuestra lengua y en los copiosos ambientes del campo dominicano para auscultar, desde la fuente de la lengua viva, la cultura campesina con el propósito de ilustrar, como lo hace en su novela Guazábara, significativos parlamentos criollistas mediante la descripción de escenas y pasajes en los que las ciguapas, singulares criaturas de la imaginación popular dominicana, vajean a los perros antes de entrar, silenciosas y raudas, a las cocinas de los bohíos campestres, para regresar gozosas con la expresión de los jupeos de su peculiar lenguaje”. Una manera de ilustrar el rico y variado uso de los vocablos peculiares del español dominicano, como ciguapa, vajear, bohío, jupeo.

Asistieron al acto los alcaldes de Miami y de West Miami, quienes distinguieron a la Academia, declarando el día 21 de marzo, como “Día de la Academia Dominicana de la Lengua”; y le entregaron a su director las llaves de la ciudad y sendos pergaminos de reconocimiento a María José Rincón, Fabio Guzmán Ariza y Bruno Rosario Candelier. En la organización de la actividad colaboraron los doctores Marcos Antonio Ramos y Orlando Rodríguez Sardinas, de la Academia Norteamericana de la Lengua Española; el Cónsul General de República Dominicana en Miami; y directivos de la Casa Cultural Dominico-americana, la Cámara de Comercio Domínico Internacional de la Florida y la Fundación Guzmán Ariza pro Academia Dominicana de la Lengua.

Los redactores del Diccionario del español dominicano, María José Rincón, Fabio Guzmán Ariza, Roberto Guzmán y Bruno Rosario Candelier, fueron reconocidos por el aporte de esta singular obra al pueblo dominicano a través de las voces dominicanas, como es este encomiable legado de la ADL.

Miami, 20 de marzo de 2014.

Celebran seminario sobre la tradición metafísica en la poesía

Los directores de las Academias Puertorriqueña y Dominicana de la Lengua Española, doctores José Luis Vega y Bruno Rosario Candelier, presidieron la celebración del seminario “La tradición metafísica en la poesía contemporánea”, dirigido a escritores, intelectuales y poetas a quienes les insufló un despertar hacia un mundo desconocido, que los organizadores vincularon a la creación poética en la literatura moderna. Esta convocatoria literaria, con especial atención a poetas, escritores y académicos, se efectuó en el Santo Cerro de La Vega Real.

Esta jornada literaria fue precedida por la presentación de una nueva obra de Bruno Rosario Candelier,La experiencia cuántica en la poesía de José Luis Vega, en la que se estudia la lírica del ilustre poeta puertorriqueño a la luz de la teoría de la física cuántica y los conocimientos de la metafísica y la dimensión estética del lenguaje.

El libro está enfocado en la más reciente obra poética de José Luis Vega, Sínsoras, inspirada en vivencias estéticas y espirituales del poeta boricua. La obra describe al poeta como un ser sensible que ha sido capaz de interpretar aquellas manifestaciones de la naturaleza que la ciencia de la física cuántica ha podido constatar con la certeza de la comprobación con datos avalados en una fuente investigativa mediante la aplicación del método científico de experimentación y comprensión, expresó Gisela Hernández al presentar la obra del académico dominicano.

Por su parte, al abordar la experiencia cardinal en José Luis Vega, Rosario Candelier consignó: “La enseñanza milenaria del pensamiento presocrático gravita en la poesía de José Luis Vega. Se trata de la intuición cósmica que enaltecieran pitagóricos y platónicos, que Leonardo da Vinci sintetizara en acertada frase de inspiración cristiana, gnóstica y cabalista: “Todo viene de Todo, todo deviene en Todo y todo vuelve al Todo”. Articulado a una perspectiva científica, prevalido del lenguaje metafísico y de los modernos recursos de la creación poética, José Luis Vega retoma la sabiduría espiritual de iluminados y contemplativos para hacer del poema una gema de verdades de vida e inspirados cantos, tendencia afín a la sensibilidad espiritual de quien ha dado el salto a la metafísica en pos de una veta profunda, mística y cuántica, para darle hondura, belleza y sentido a la creación poética. Su lírica funda una visión integradora que recrea y sintetiza la armonía universal de la ternura cósmica, la visión objetivada de la ciencia física y la onda interior de la experiencia cardinal, cuántica y metafísica, en su devenir misterioso y mágico. Esa confluencia de conocimientos y actitudes da categoría y esplendor a una poética que encauza el fluir de lo viviente bajo la suprema apelación de la fuerza que atrae todo hacia su centro, pues como dice nuestro poeta, “Todo tiende hacia el otro/…y siempre sin reproche”. A esa visión universal se suma la emoción estética y la fruición espiritual de una poesía arraigada en la experiencia cuántica y la vivencia metafísica con encanto lírico y fascinación simbólica”.

José Luis Vega inició su participación con un testimonio sobre la forma casual como encontró unos libros de metafísica. Escuchar el descubrimiento por parte del poeta de una puerta que abrió sus ojos y su intelecto a un mundo inexplorado hasta ese momento fue algo que cautivó a los presentes. Ese singular descubrimiento le permitió apreciar en la poesía de grandes autores las verdades que hasta ese momento para él eran incomprensibles. Esos libros antiguos y de títulos extraños le despertaron la curiosidad metafísica que se acentuó tras una experiencia cardinal ante la pérdida física de su padre, en la que fue testigo de una “transfiguración”, ya que presenció una alteración de su figura estando a solas con el cadáver de su padre donde comienza a encontrarle un sentido a determinadas experiencias suprasensibles. Esos libros hablaban de muerte, de cielos y de transición. Esos hechos marcaron su iniciación en los estudios teosóficos y despertaron su interés por personajes y temas de la trascendencia cuya influencia aprecia en la literatura contemporánea. “Las ideas solo valen algo cuando uno las descubre por sí mismo”, dijo Vega. Citó autores como Leopoldo Lugones, César Vallejo y Jorge Luis Borges, que leyeron libros como los que él leía, y entonces descubre que parte de la dificultad de algunos poemas se debe a que están ligados con el pensamiento metafísico. Sostuvo que desde el siglo XIX hay constancia de que importantes intelectuales, escritores y sectores sofisticados de la alta sociedad se dedicaban a estudiar esos temas del pensamiento metafísico y otros saberes que forman parte del conocimiento esotérico. Habló de la obra de madam Blavasky, y cómo fue superando la ignorancia sobre ese tema.

José Luis Vega dispuso el desarrollo del seminario sobre un tema que se presta para causar rechazo o cuestionamiento; sin embargo, manejó la exposición con una fluidez y un dominio de conocimientos, a lo que sumaba una actitud armónica, enriquecedora y ejemplar. Las palabras salían de los labios del intelectual boricua expuestas sobre un tema manejado con propiedad y rigor, porque no lo aplicaba a cosas inventadas o leídas por otros, sino integradas a sus propias vivencias y sus recuerdos, a lo vivido, lo soñado y lo imaginado por el autor.

Los participantes se conectaron en este seminario con apasionado interés cuyo objetivo era introducir a los presentes en el mundo de la sabiduría metafísica a través de la creación literaria y al mismo tiempo despertar una emoción estética y una fruición espiritual para valorar más allá de los límites que frenan nuestra inteligencia. El expositor insufló vida nueva a la interpretación estética y espiritual de importantes textos poéticos, mediante una interpretación que procuraba ser leal, honesta y cónsona con sus vivencias e intuiciones para canalizar en sus palabras una obra de calidad y trascendencia. Con suerte dejó hambriento de conocimientos a más de uno que no se conformaron con lo que escucharon del intelectual puertorriqueño, pues se sintieron motivados para lanzarse al estudio de grandes figuras antecesoras del pensamiento trascendente. “Hacerse uno con el Todo y que todo se vuelva Uno”, sentencia que podría cifrar una de las conclusiones de este memorable encuentro literario.

José Luis Vega ejerció la docencia de literatura y dirigió el Departamento de Estudios Hispánicos y el decanato de Humanidades en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. Fue también director ejecutivo del Instituto de Cultura Puertorriqueña. Actualmente es el director de la Academia Puertorriqueña de la Lengua Española y es reconocido como el poeta boricua más relevante en la actualidad. El ilustre poeta puertorriqueño es también miembro correspondiente de la Academia Dominicana de la Lengua.

Santo Cerro,  15 de marzo de 2014.

Celebran coloquio en Santiago sobre el Diccionario del español dominicano

Los miembros del equipo lexicográfico de la Academia Dominicana de la Lengua se trasladaron a la ciudad de Santiago de los Caballeros para conducir un coloquio sobre el Diccionario del español dominicano en acto público que tuvo lugar en el Centro Cultural Eduardo León Jimenes, prestigiosa institución cultural de la ciudad cibaeña.

Participaron en esa jornada lingüística el Lic. Fabio Guzmán Ariza, presidente de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua; la Lic. María José Rincón, coordinadora del equipo lexicográfico de la Academia; y el Dr. Bruno Rosario Candelier, director de la Academia Dominicana de la Lengua. Leer más

Catharina Vanderplats dicta conferencia sobre la cacica Anacaona

En el marco de la Tertulia “Letras de la Academia”, que coordina la Dra. Ofelia Berrido, la escritora, crítica literaria y profesora Catharina Vanderplats de Vallejo dictó la conferencia “La Cacica Anacaona, 500 años de reconstrucción ideológica” Leer más

Tony Raful Tejada gana Premio Nacional de Literatura

El poeta, ensayista y académico Tony Raful Tejada obtuvo el Premio Nacional de Literatura 2014, que auspicia la Fundación Corripio con el aval del Ministerio de Cultura. Raful Tejada fue reconocido por la relevancia de su labor poética entre los escritores de la postguerra, distinguiéndose por la variedad temática y la amplitud de su obra de ensayo sobre gestas patrióticas y figuras históricas del siglo XX. El jurado estuvo conformado por los rectores de las universidades UASD, PUCMM, UNPHU, UCE, UCSD e INTEC. Leer más

Presentan poemarios de Ana María Fiallo

 Con la participación de Aída Montero, Jennet Tineo, Sélvido Candelaria y Bruno Rosario Candelier, director de la Academia Dominicana de la Lengua, se pusieron a circular los poemarios de Anam Fiallo Poemas al viento y Estaciones. La directora de la Biblioteca “Juan Bosch” expresó que esta presentación sigue dando testimonio del trabajo encomiable que hace el Círculo Literario “Pedro Mir”, bajo la dirección de Bruno Rosario Candelier, cuyos integrantes sesionan en la Biblioteca Juan Bosch. Leer más