El punto

El punto (.) es el signo de puntuación por excelencia, el más usado de todos y el más antiguo; por ello, de punto se derivan las palabras puntuar y puntuación, referidas al conjunto de todos los signos ortográficos. En tiempos romanos el punto se utilizaba inicialmente para separar las palabras en las inscripciones en latín, en lugar de dejar entre ellas un espacio en blanco. Después del siglo IV d. C., se empezó a usar para marcar las pausas en los textos, colocándolo a distintas alturas para indicar la duración de la pausa. Así, un punto colocado al nivel de la línea, como se usa actualmente,  indicaba la pausa más corta; un punto en el centro, una pausa más larga, y un punto en posición superior, la pausa más larga de todas. Los primeros libros impresos en español utilizaron este sistema, que equivalía, más o menos, a como se usan la coma, el punto y coma, y el punto hoy en día. Leer más

Cruza – a sabiendas de que – suéter (jersey) – cool – duna

CRUZA

“Su máquina no era más grande que una computadora de escritorio, y parecía una CRUZA entre una máquina de tejer hogareña y el torno de un dentista”.

Quienes tienen el oficio de escribir por lo regular adoptan un español que algunos rehúsan llamar lengua internacional, o español internacional, lo que en otros momentos de la historia de la lengua se ha denominado español estándar, con todo y la adaptación del anglicismo. Leer más

Con o sin

Pocas cosas quedan sin explicación en la lengua. No hay nada como poder dar una razón clara cuando un hablante nos plantea una duda.

Las palabras de una sola sílaba no llevan tilde. La presencia o la ausencia de la tilde en español sirve para marcar cuál es la sílaba tónica de una palabra y su uso deja de tener sentido cuando la palabra es monosílaba.

Cuando uilizamos la tilde en las palabras de una sola sílaba la justificación es otra. En estos casos la llamamos tilde diacrítica porque nos sirve para diferenciar dos palabras distintas pero que coinciden en su forma, aunque una de ellas es tónica y la otra no. En esta situación se encuentran las parejas mí/mi y sí/siLeer más

Furro – sacar – dosieres – discar – encriptar – tipear

FURRO

“. . .se realizan los tradicionales “amaneceres gaiteros”, fiestas que duran hasta el amanecer con FURRO, maracas, cuatro y tambor”.

Una de las más emocionantes lecturas es la que incluye nombres de plantas, flores e instrumentos musicales. En la cita, por los instrumentos conocidos que acompañan a la voz “furro” se deduce que se trata de un instrumento musical rústico. Leer más

Encallar – atracar – planeta – órdenes- publicitar – rutinización – basar

ENCALLAR – ATRACAR

“. . .quien tiene grandes planes de conseguir permisos para ENCALLAR, de modo que los clientes puedan venir en barco al brunch (“desalmuerzo”) de los domingos”.

Algunos errores con lo que uno se topa en la lectura del diarismo impreso desconciertan por lo elemental de la falta que denotan. Sí, lo que desazona es la carencia de cultura y lectura de quien cae en este tipo de faltas. El error que se encuentra en la cita de esta sección es inaceptable que provenga de la redacción de un profesional de la comunicación social. Leer más

Sin número (sinnúmero) – aureola (areola, *auréola) – prevenible – *intrusivo, a – eternización

SIN NÚMERO – SINNÚMERO

“. . .y que ello traerá al mercado inmobiliario, en corto plazo, un SIN NÚMERO de nuevas oportunidades para quienes busquen un sitio adonde vivir. . .”

Hace años se culpaba al cajista de los “errores de imprenta”. Ese individuo cargaba con todas las culpas ajenas porque en la mayoría de los casos era un anónimo que no conocía las reacciones de los lectores ante las erratas que aparecían en libros, revistas y periódicos. Leer más

Nunca sabemos demasiado

Hay algunas palabras que, a pesar de su sencillez, vemos usadas erróneamente con cierta frecuencia. La palabra demasiado, y su forma femenina demasiada, es una de ellas. Intentemos deshacer el entuerto, como si fuéramos caballeros andantes manchegos. Cuando la aplicamos a un sustantivo la usamos en función de adjetivo. Con ella expresamos que lo que el sustantivo significa tiene exceso o demasía: demasiado trabajo. En esta función como adjetivo presenta variación de género (masculino y femenino) y número (singular o plural) para concordar con el nombre al que se refiere: demasiado calor, demasiada lluvia, demasiadas emociones. Leer más

En boca de todos

A falta de otra excusa, me consuelo pensando que aprovecho los habituales tapones capitaleños para algo más que para desesperarme. Entre los participantes en un popular programa vespertino de radio surgió la duda de cuál era el plural de maní. ¿Maníesmanís o manises? Hubo opiniones para todos los gustos. Vaya para ellos mi felicitación porque, medio en broma, medio en serio, la duda gramatical y la corrección a la hora de resolverla se consideró importante. Me habría gustado poderles hacer llegar la regla gramatical en ese momento pero, ya saben, el guía está reñido con los aparatos electrónicos, o así debería ser.  Leer más

Tejas (Texas) – acerbo (acervo) – canibalizar – acartonar

TEJAS – TEXAS

“. . .que todavía no encuentran la forma para reparar los daños emocionales y deportivos de la que puede considerarse la peor derrota en la historia de la organización TEXANA”.

Los estudiosos de la lengua en la práctica de su español escrito y oral tienen derecho a la libertad de sustentar opiniones que por necesidad no son acordes con lo que prescriben las Academias. A veces no se trata solo de discrepancias con respecto de lo sugerido por las autoridades encargadas de preservar la unidad de la lengua común. Leer más

Para mucho más

No me canso de recomendarles que tengan a mano un buen diccionario. A mí se me hace imprescindible y aspiro a que muchos de ustedes compartan esta necesidad. El diccionario nos ayuda con el significado de las palabras, nos asiste, y mucho, con la ortografía y también, sí, también, con la gramática. Leer más