PONENCIA AL CONGRESO SOBRE JUAN PABLO II EN BOGOTÁ
La creación poética de Karol Wojtyla centra su atención en la búsqueda de lo divino. En atención a ese objetivo espiritual y estético, tres facetas concitan la sensibilidad mística del Mitrado polaco. En primer lugar, la realidad natural en su dimensión sensorial y cósmica; en segundo lugar, la realidad existencial en su proyección humanizante; y en tercer lugar, la realidad trascendente en su faceta deíctica de valores permanentes. En “Cántico al esplendor del agua”, uno de sus poemas ejemplares, Karol Wojtyla asume el encanto de la Creación como expresión de lo divino. Este hermoso poema integra en su composición el encanto expresivo de la belleza sensorial, la mirada amorosa del sujeto lírico y el sentimiento de lo divino ante el elemento de la Creación.
Mediante la poesía crea el poeta una forma estética para ponderar el valor de la Vida, la significación del Mundo y la magnificencia del Creador. La lírica mística es la más alta forma de expresión de tan excelsos atributos. El sentimiento místico se funda en el amor, la verdad y el bien, como paso previo a la búsqueda de lo divino.
«La profunda voz del corazón», a la que alude el Mitrado poeta en su poema dedicado a la madre, alude al lenguaje del yo profundo en su vínculo con lo Eterno. El hombre, en contacto consigo mismo, descubre el lenguaje del yo profundo y siente el eco de las cosas y expresa esa dimensión de lo viviente. En comunión con lo existente se le revela el sentido místico del Mundo. La intuición de lo profundo, en su hondo misterio, culmina en la conciencia de lo Absoluto, según la visión espiritual de este eminente poeta de nuestro tiempo.
Apreciamos en diferentes poemas del Mitrado polaco el lenguaje poético de la lírica mística, que centra su atención en determinados recursos de la invención retórica, como antítesis, paradojas, hipérboles, metáforas y símbolos, formas expresivas que enlazan lo natural con lo sobrenatural y hacen sensible su visión de lo trascendente. La sensibilidad lírica del destacado poeta místico conecta con lo sobrenatural ya que la lírica mística encauza y potencia la zona de la realidad trascendente más sublime y la hace comprensible a la intelección humana mediante los recursos simbólicos del lenguaje poético. Ya se sabe que la poesía y la mística coinciden en la búsqueda que mueve su sensibilidad, por lo cual este agraciado creador de una lírica mística ejemplar acude al canto y la palabra para testimoniar, con la sabiduría de su alta espiritualidad, la huella fecunda del Logos poético.
El excepcional genio y la titánica labor de su Santidad Juan Pablo II permitieron cimentar la propuesta de Nuevo Humanismo. El impresionante carisma de su personalidad y su impactante actuación en distintos campos y, al mismo tiempo, la riqueza conceptual de las enseñanzas referentes a la filosofía, teología, cultura, arte, teatro, literatura, historia, sociología, política, derecho, psicología, educación y comunicación, etc. que transmitía Juan Pablo II, permiten conocer un modelo de vida ejemplar, lleno de valores y coherencia excepcional, así como interpretar de manera edificante la realidad del mundo de hoy.
En este Congreso Internacional sobre la obra de Karol Wojtyla hubo una masiva participación de un público altamente interesado en la figura espiritual del Papa polaco y donde se enfocaron diversos temas vinculados con el inmenso legado intelectual, moral, espiritual y estético de quien fuera el Papa más carismático del pasado siglo XX, con interesantísimas ponencias sobre su vertiente teológica, doctrinal, política, antropológica y cultural. Entre otros aspectos memorables de este encuentro intelectual, me dio mucho gusto participar en el acto en que la Universidad de América, cuyo Rector es también el Director de la Academia Colombiana de la Lengua, don Jaime Posada, me hizo el honor de invitarme a compartir el banquete en homenaje al Arzobispo de Cracovia, S.E. Stanislaw Dziwisz, que fuera el secretario personal del ilustre Mitrado poeta. Bogotá, Universidad Sergio Arboleda, 19-20 de febrero de 2010.
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