Por Rafael Tobías Rodríguez Molina
Es bien sabido por los entendidos en el buen uso del español que, al ser tantos los elementos que intervienen en la escritura de ese idioma, se puede afirmar que una parte considerable de los que han realizado la carrera de letras son capaces de emplearlo con la corrección debida. Pero los que tendrán una mayor garantía del dominio escrito de esa lengua son especialmente aquellos que, además de haberse formado en esa carrera, han ejercido la docencia en el área de las letras y en la enseñanza del español por un largo período.
En este artículo se presentan las diferentes normas o reglas de la gramática que hay que conocer y aplicar para emplear con corrección el español o para que los parcialmente formados en los conocimientos de nuestra lengua puedan acercarse aunque sea un poco más a la corrección idiomática. A continuación véase el conjunto de normas en el aspecto teórico con el acompañamiento de variados ejemplos. Revisemos las normas:
- Las reglas generales de acentuación: Estas se aplican a las palabras agudas, graves, esdrújulas y sobreesdrújulas. Comencemos a ver las normas aplicadas a cada una de esas palabras.
a). Agudas acentuadas: llevarán tilde las que terminan en vocal o en las consonantes n y s (maná, pensé, maní, oró, Perú; también, después). No llevarán tilde las terminen en consonante diferente de n y s (cordel, pared, coñac, feliz, etc.).
b). Graves acentuadas: son las que terminan en consonante diferente de n y s (ángel, cráter, césped, Rodríguez). No se les marcará la tilde a las que terminan en vocal o en las consonantes n y s (alma, cante, cursi, tomo, lomas, llegaron).
c). Esdrújulas: todas llevan tilde (píldora, tránsito, análisis, régimen, crítica, cívico, cúmulo, dígale).
d). Sobreesdrújulas: todas llevan tilde (dígaselo, diciéndoselo, repitiéndosela, contéstaselos).
Nota: Debe tenerse en cuenta que también se les aplican las reglas generales de acentuación a las palabras que tienen:
a) diptongo formado por las vocales cerradas (i, u): cuidado, destruido, ciudad, oriundo (sin tilde por ser palabras graves terminadas en vocal); destruí (con tilde por ser aguda terminada en vocal); cuídala (con tilde por ser esdrújula); cuídaselos (con tilde por ser sobreesdrújula).
b) diptongo formado por una de las vocales abiertas (a, e, o) + una de las cerradas (i, u átonas): paisaje, pausa, cauce, prohibido (sin tilde por ser graves terminadas en vocal); o diptongo formado por una de las vocales cerradas átonas (i, u)+ una de las vocales abiertas (a, e, o): piano, hielo, propio, cuadro, cuenta, cuota, prohibiendo (sin tilde por ser graves terminadas en vocal).
c) hiato formado por dos vocales abiertas (a, e, o): creo, sea, saeta, cacao (sin tilde por ser graves terminadas en vocal), pateó( con tilde por ser aguda terminada en vocal), aéreo(con tilde por ser esdrújula).
d) hiato formado por una de las vocales cerradas tónicas (í, ú)+ una de las vocales abiertas (a, e, o): tía, píe, río; púa, actúe, actúo; o formado por una de las vocales abiertas (a, e, o)+ una de las vocales cerradas tónicas (í, ú): país, Paúl, reí, reúne, prohíbe. Como se puede constatar, todas esas palabras llevan tilde, ya que una vocal abierta aparece o antes o después de una vocal cerrada tónica (en la palabra bahía existen las dos posibilidades, pues una abierta está antes y otra está después de la cerrada tónica (ba-hí-a), la cual es pronunciada con una fuerza mayor que las abiertas, que es lo que da origen a ese tipo de hiato, el cual está por encima de las reglas generales de acentuación, y la palabra que lo tiene siempre irá acentuada en la vocal cerrada, y esa es la razón por la cual muchas de esas palabras (tía, actúe, reúne, prohíbe…) al ser graves y terminadas en vocal, no deberían tildarse y, a pesar de eso, se escriben con tilde.
- Las reglas para las palabras compuestas, las cuales pueden formarse:
a). A partir de dos palabras de más de una sílaba, en cuyo caso si la primera tenía tilde, la pierde y a la nueva palabra se le aplican las reglas generales de acentuación (décimo+quinto=decimoquinto, décimo+ séptimo=decimoséptimo, así+mismo=asimismo).
b). A partir de una palabra, sea esta de más de una sílaba o monosílaba + otra(s) palabra(s) monosílaba(s), en cuyo caso se aplican las reglas generales de acentuación (punta + pie=puntapié, va +y +ven=vaivén, diez +y +seis= dieciséis).
c). A partir de un verbo más uno o más pronombres enclíticos(=unidos al verbo a la derecha de este); en ese caso, a la nueva palabra se le aplican las reglas generales y la del hiato(diga +le=dígale, diciendo + le=diciéndole, caer +se +le=caérsele, diciendo +se +lo=diciéndoselo); reír +se=reírse, oír +lo=oírlo, reír +se +le=reírsele (en estas tres últimas palabras se aplica la regla del hiato por vocales abiertas y cerradas tónicas, y en ríe +te= ríete, por la presencia seguida de cerrada tónica y abierta.)
- La regla aplicada a los monosílabos, la cual dice que “los monosílabos no se acentúan” (fue, fui, vio, dio, guio, rio, Dios, o, tres, seis, diez, cien…)
- La regla del acento diacrítico, según la cual se tilda a una de dos pares de palabras monosílabas, bisílabas o trisílabas que, de acuerdo con las reglas del español, no deberían llevar tilde. Esa tilde sirve para diferenciar palabras semejantes en su estructura, pero diferentes en su categoría gramatical, en la fuerza tónica con la que se pronuncia la vocal acentuada y en el significado: tú(pronombre)- tu(adjetivo posesivo); mí(pronombre)- mi(adjetivo posesivo); sí(pronombre y adverbio de afirmación)- si(condicional); dé(verbo)-de(preposición); más(adverbio de cantidad) –mas(equivalente a pero); cuál(interrogativo y exclamativo)-cual(relativo); qué(interrogativo y exclamativo) –que(relativo e iniciador de una proposición de objeto directo=Quiero que vengas); quién(interrogativo y exclamativo) –quien(relativo); adónde (interrogativo y exclamativo)- adonde(no interrogativo ni exclamativo),
- Las reglas referentes a los signos de puntuación: A esos signos se les ha llamado “signos auxiliares de la lectura y del sentido; de ahí la importancia de que se les emplee correctamente, ya que algunas veces, el empleo de uno que no debería emplearse o el no empleo de uno que debería emplearse, puede cambiar el sentido de lo que se quiere expresar. Ejemplos: a) Este sobrino vive en La Vega.; b) Este, sobrino, vive en La Vega. (Como se puede notar, en el ejemplo a) no se usó coma, mientras que en el b) se emplearon dos comas para indicar que “sobrino” tiene la función de vocativo. Además, por el uso de esas comas en el ejemplo b), se deja dicho que el tío habla con su sobrino, y en el a), al no tener las comas, se expresa que el tío habla con otra persona.)
Veamos las normas referentes al empleo de cada uno de esos signos:
a). Empleo de la coma: esta se usa en las enumeraciones y en los incisos, incluyendo el vocativo, el cual tiene tres posibilidades: una coma si es antepuesto (Xavier, espero que vengas pronto); dos si es intercalado (Espero, Xavier, que vengas pronto); y una coma si aparece colocado al final (Espero que vengas pronto, Xavier). En algunos casos también se puede emplear coma delante de pero en oraciones breves. Ejemplo: Ese jovencito es sumamente inteligente, pero es extremadamente desaplicado. Si la oración es muy breve y sencilla, lo más aconsejable es no usar coma delante de pero. (Es fuerte pero torpe.)
b). Empleo del punto: se escribe al final de cada oración; a veces delante de pero en oraciones de cierta extensión, y en lugar del punto y coma en forma opcional. (Él no es inteligente ni saludable. Pero con el gran esfuerzo personal y constante que hace y el empeño de sus padres, le está yendo bien en sus estudios. Él no es muy inteligente; sin embargo, es muy aplicado.; Él no es muy inteligente. Sin embargo, es muy aplicado.)
c). Empleo del punto y coma:
a). Uso obligatorio: Este signo solamente tiene un uso obligatorio, y es el caso de una enumeración que lleva o tiene coma en su interior. Ejemplos: a) Le enviamos la lista de los especiales que tenemos en nuestra tienda: corbatas, a RD$52.00 la docena; camisas escolares, a RD4$75.00 la docena; camisillas, a RD$33.00 la docena; pantalones escolares, a RD$165.00 la docena. ; b) Visitamos las siguientes ciudades: Santo Domingo, la Capital dominicana; Bonao, la villa de los hortensias; La Vega, la ciudad olímpica; Moca, la ciudad del viaducto, y Santiago, la ciudad corazón.
b). Usos opcionales: a) Los que aparecen en el empleo de la coma y del punto, como es el caso del caso de “pero”, y del caso de las yuxtapuestas, que ofrecen la opción de emplear el punto y coma o el punto. En el caso de los nexos explicativos , como “es decir”, “o sea”, “esto es”, “por lo tanto”, “por supuesto”, “por consiguiente”, “por otra parte”, “además de eso”, etc., las dos opciones posibles son el punto y coma o el punto. Existen otros usos del punto y coma que las gramáticas no especifican y que dependen de criterios subjetivos del redactor del texto, aunque conviene usar criterios subjetivos con mucha moderación.
c). Empleo de las comillas: se deben usar al principio y al final de las citas textuales o para destacar una palabra o una frase en una oración. (José Martí dijo: “Nuestro vino es agrio pero es nuestro vino.” La palabra “ahí” se escribe con h y tilde.
d). Empleo del signo de interrogación y el de exclamación: hay que colocarlos al inicio y al final de las frases u oraciones interrogativas o exclamativas directas, pero no lo llevan en las indirectas. Ejemplos: ¿Quién te lo dijo?- Quiero saber quién te lo dijo. ¡Muy bien, hijo mío!- La madre exclamó que qué bien actuó su hijo.
c). Empleo de los puntos suspensivos: los mismos se colocan para indicar que se deja de copiar parte de un texto, tanto en el interior de este como también al final del mismo. Ejemplo: El profesor, aparte de otras cosas, felicitó a Manuel por las brillantes notas obtenidas en el semestre. (El profesor…felicitó a Manuel por las brillantes notas obtenidas en el semestre. Allí se cultivan muchos vegetales, como ajíes, tomates, cilantro, berenjenas, zanahorias…
- La regla de acentuación aplicada a las oraciones interrogativas o exclamativas directas e indirectas: si la oración tiene una palabra interrogativa, como “cuál”, ”qué”, “dónde”, “quiénes”, “adónde”…, se mantiene la tilde en la oración interrogativa o exclamativa indirecta. Ejemplo: ¿Quién de ustedes llegó primero al aula? (Quiero saber quién de ustedes llegó primero al aula.) Las interrogativas indirectas se inician por varios posibles verbos, como “querer saber”, “interesar saber, “es necesario saber”, “preguntar”, “indagar”, “investigar”, etc.
- La regla para las oraciones interrogativas y exclamativas iniciadas por ¿Qué o ¿Que; en esos casos si el ¿Qué es interrogativo llevará la tilde, pero si el ¿Que no es interrogativo, no llevará tilde. Ejemplos: ¿Qué fue lo que te dijo?- ¿Que te vaya temprano fue lo que te dijo? En el caso de las interrogativas iniciadas por ¿Que…, hay que tener en cuenta que el sistema le marca automáticamente la tilde a la “e” de esa palabra cuando uno la escribe; en ese caso se borra esa “é” y se escribe “e”.
- La regla aplicada a los adverbios terminados en “mente”. Esa regla dice que:
a). Si el adjetivo con el que se forma el adverbio tiene tilde, la mantiene al añadirle “mente”. Ejemplos: tardía+ mente= tardíamente; única+ mente= únicamente.
b) Si el adjetivo no tiene tilde, la nueva palabra no tendrá tilde. Ejemplos: sabia+ mente= sabiamente; sutil+ mente= sutilmente.
Préstenles mucha atención a esos aspectos de nuestro español. Una forma de tenerlos muy presentes, para consultarlos y aplicarlos, es tener en su escritorio una copia de esos aspectos, que vienen a ser un resumen de lo que normalmente aparece contenido en forma dispersa, en muchas páginas de texto. Manos a la obra, apreciados lectores y cultivadores de nuestra lengua española.