PRESENTACIÓN DE POEMARIO DE DINÁPOLES SOTO BELLO
El libro de poemas Hojas del camino, de Dinápoles Soto Bello, fue presentado en el marco de la semana del libro de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, de Santiago. Las palabras de bienvenida las dijo Daniel Suárez, vicerrector académico de la PUCMM, quien expresó: “Con esta puesta en circulación de Hojas del camino, del profesor Dinápoles Soto Bello, exaltamos la semana del libro, acto que inauguramos el pasado en la sala de exposiciones de este campus con múltiples actividades para celebrar el libro y la lectura. La mejor manera de concluir esta semana de celebraciones es con un maestro de generaciones como Dinápoles Soto Bello, con medio siglo de docencia en esta universidad”.
El doctor Bruno Rosario Candelier presentó el poemario y ponderó la obra poética de Dinápoles Soto Bello, basado en estos versos del poema “Tiempo muerto”: “Paisaje y conciencia/dos soledades confundidas/en una sola mansedumbre”. Explicó Rosario Candelier que esos versos retratan la sensibilidad y la conciencia de Dinápoles Soto Bello, tras definir al autor del poemario como “el único poeta dominicano que es físico y metafísico al mismo tiempo”.
El disertante explicó a los concurrentes: “Paisaje y conciencia son dos palabras claves para entender la belleza y el sentido de la lírica de Soto Bello: el paisaje se vincula a la física, y la conciencia a la metafísica, dos vocablos que revelan un acierto intuitivo del autor, al tiempo que perfilan la dimensión física y metafísica de su sensibilidad estética”. Y de inmediato añadió:“El paisaje alude a la sensorialidad de lo viviente. La sensorialidad de las cosas tiene que ver con la física porque alude a la materialidad de lo existente; y la conciencia alude a la espiritualidad, es decir, a la dimensión metafísica de fenómenos y cosas. Por consiguiente, esas dos palabras, “paisaje” y “conciencia”, claves en la poética de esta obra, retratan la faceta física y la vocación metafísica de Dinápoles Soto Bello”. Entonces el presentador del poemario explicó que la palabra “mansedumbre” alude a los antiguos pensadores presocráticos y los antiguos taoístas chinos, remontándose a una época muy anterior a Cristo. Y justamente, cuando nuestro poeta pone su alma en conexión con el alma de lo viviente experimenta esa relación entrañable con lo físico, vuelca su sensibilidad física y se compenetra con la peculiaridad tangible de las cosas; y, al mismo tiempo, conecta su espiritualidad con la dimensión metafísica o intangible de lo existente, índice de que hay en Dinápoles Soto Bello, el científico de la física y el poeta de la metafísica, convoca una cordial vinculación con el alma de las cosas”, añadió el director de la ADL.
El autor de Hojas del camino agradeció con emoción y humildad la buena acogida de su poemario. Tres locutores recitaron algunos de los poemas, provocando emociones y evocaciones. Los profesores Miguel Suárez, Carmen Pérez Valerio, Apolinar Núñez, Liliana Montenegro, Jorge Rincón y Rosario Granados, entre otros profesores y estudiantes y cultores de las letras estuvieron presentes en dicho acto.
Dinápoles Soto Bello nació en Baní en 1941. Recordó que entre la ciencia y la poesía varios científicos escribieron versos, tales como Newton y André-Marie Ampère, siendo este último uno de los que más ha admirado, a quien consideró “un genio extraordinario y sensible”. Dijo que un biógrafo de la época, tomando la definición de hombre perfecto del filósofo Ernest Renan, dijo: “El hombre perfecto es aquel que es a la vez poeta, filósofo y hombre virtuoso”, y añadió que “todos esos atributos los tiene Ampere”. Subrayó el profesor Soto Bello que “cuando yo leí eso me di cuenta de lo imperfecto que yo era”. Dichas palabras, expresadas por ese científico de la física, sirvió de inspiración al “poeta físico y metafísico” de las letras dominicanas.
Santiago, PUCMM, 15 de junio de 2019.
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