Presentan poemario “El cantar de las lámparas”

El Dr. Bruno Rosario Candelier presentó la obra poética El cantar de las lámparas, de la autoría del poeta vegano Jorge Suárez, en los salones de la sociedad cultural “La Progresista”, de la ciudad de La Vega. En su disertación, el académico dominicano manifestó que con El cantar de las lámparas aparecen los indicios de un renacer de la cultura en La Vega y comentó que la poesía del vate dominicano constituye un estímulo para la renovación poética en la ciudad del Camú.

En el prólogo de El cantar de las lámparas, el director de la Academia Dominicana de la Lengua y presidente del Ateneo Insular hace constar la dimensión metafísica y simbólica de este poemario: “La creación poética de Jorge Suárez recogida en El cantar de las lámparas encarna una interrogación metafísica de la existencia. La misma raya entre lo racional y lo existencial, con clara conciencia de la pregunta por el sentido. Con esta forma de escribir se inscribe Jorge Suárez dentro de la visión metafísica de lo real”.

La poesía metafísica, como expresión de la intuición profunda, capta lo que escapa a la percepción de los sentidos. Se trata de una reflexión lírica, estética y simbólica, mediante un lenguaje especializado con el que el poeta traduce en imágenes sensibles, los pensamientos y las percepciones que atrapa su intuición. El cantar de las lámparas permite ahondar en esa dimensión trascendente y profunda puesto que se compenetra con esa zona misteriosa que entraña la búsqueda del sentido.

La creación poética de Jorge Suárez da hondura y belleza a su visión lírica del mundo. Estima que el poeta vegano, en el poema “Cosmos”, que en su condición de poeta metafísico, puede descifrar el vacío del Cosmos mediante una interpretación lírica.

Subrayó Rosario Candelier que la formación profesional, el sentido ético, la inclinación por la belleza y la vocación humanizante que distinguen al poeta vegano, son facetas expresivas de las inclinaciones intelectuales, morales, estéticas y espirituales que subyacen en los versos del valioso cultor interiorista.

Sentirse un niño ante la Creación es quizás el rasgo más hermoso de la disposición lírica y estética, metafísica y simbólica de Jorge Suárez, “el nuevo portalira de las letras veganas”, como se puede apreciar en “El vació”:

Abre tus brazos al vacío,

estíralos,

como si fuesen veloces destellos de luces

que se desplazan leguas por leguas,

calándolos.

Abre tus brazos al vacío,

como fugaces estrellas

que galopan, que galopan,

despídelos

como ríos sin regreso,

desenfúndalos al vacío,

al monstruoso vacío…

¡Ese vacío infinito es monstruo!

Tú no lo sabes, porque lo tocas,

te bañas de él…

Tú eres parte de ese monstruo,

de ese monstruoso vacío,

que no tiene fin,

que no hay, ni lenguas mentirosas que lo crucen,

ni brazos imaginarios que lo abarquen.

Solo el pensamiento de un poeta

con garras

alcanza a descifrarlo,

cual osado poeta a su regreso

se le observa, descabellado,

consciente de que recibe su castigo.

¿Qué es lo que hay en lo profundo del mar?

¿Qué es lo que hay en el epicentro de la Tierra?

Lo que hay en lo profundo del mar es nada.

Lo que hay en el epicentro de la Tierra es nada.

Si lo logras traer a ti, es nada,

porque lo tocas, porque lo palpas,

porque lo sientes…

Pero de ese vacío del que yo hablo,

tú no puedes nada,

tú no sabes nada.

No puedes nada, no sabes nada.

No puedes, no sabes nada…

Sociedad Cultural “La Progresista”, La Vega, Rep. Dom., 17 de agosto de 2013