*SUBFISCAL – ENFOCADO – ENFOQUE
En el caso que ocupa la atención aquí, el tratar de acuñar el nuevo vocablo carece de interés práctico porque a estos funcionarios se les conoce como AYUDANTES DEL FISCAL, ASISTENTES DEL FISCAL. Quizás la intención del redactor fue denominar al funcionario con la ayuda de una sola palabra. La idea no es mala. El producto es lo que se critica.
No hay que vacilar, cuando haga falta, para escribir ASISTENTA de fiscal si llega a ser una mujer quien desempeña las funciones. El problema con el uso del último término sugerido es que en España así se llama a la “sirvienta externa que trabaja por horas”. Esta última acepción hace que las mujeres que desempeñan estas funciones, así como los redactores, eviten herir las susceptibilidades y se mantengan escribiendo ASISTENTE para ambos sexos.
ENFOCADO
“…y sugerir la forma de hacerlo más ENFOCADO al consumidor”.
En otras ocasiones se ha comentado con relación a esta palabra y al verbo que le sirve de sustento, ENFOCAR. El vocablo está de moda en español porque en inglés es mucho lo que se enfoca fuera del campo de la fotografía.
En español el fenómeno de la imitación del inglés se suscita con frecuencia sobre todo cuando se emplean esta palabra y el verbo correspondiente en sentido figurado. Se desearía que quienes así se expresan fueran capaces de usar otros términos más apropiados.
En lugar de escribir: “…y sugerir la forma de hacerlo más ENFOCADO al consumidor”. Complacería mucho, en lugar del enfocado, ver escrito: ORIENTADO, ENFILADO, DIRIGIDO, APUNTADO.
Otra vez ocurre que hay que repetirse con respecto a aquello de que las carencias no las tiene nuestra lengua, sino que la llevamos nosotros por diferentes razones, llámese “pereza mental”, falta de imaginación o escasa dedicación al estudio o a la buena lectura.
ENFOQUE
En unas declaraciones publicadas en la prensa diaria un político del patio expresó que “…la oposición interna…debe ser el ENFOQUE de la política…” Según el “mataburros” oficial de la lengua, este vocablo significa: “Acción y efecto de enfocar.”
Sólo hay una acepción de enfoque que puede interpretarse como válida en este contexto. Véase: “fig. Dirigir la atención o el interés hacia un asunto o problema desde unos supuestos previos, para tratar de resolverlo acertadamente.” No se acierta a compaginar los significados reproducidos con las declaraciones del político.
Se podía haber expresado la idea así: “…la oposición interna…debe ser el CENTRO de la política…” Todavía no se piensa que “enfoque” y “centro” sean lo mismo, luego, no procede usar el primero en lugar del segundo.
*ILOCALIZABLE
No se pudo encontrar esta palabra en el Diccionario de la Academia. Tampoco se logró localizarla en el Diccionario de Uso del Español de la señora Moliner. El vocablo que sí se encontró fue LOCALIZABLE.
Como es de suponerse, si el último existe, no se ve ninguna objeción válida que no permita construir sobre el último vocablo, localizable, el que se ha introducido de modo lógico en la lengua, aunque no conste en el DRAE.
Esta “I “como prefijo en ilocalizable tiene el valor de “in” delante de raíces que comienzan con consonantes que no admiten la ene (N) delante.
A modo de conclusión, se aprueba del uso de la voz objeto del comentario aún cuando no conste en los anales respetados de la Lengua.
ENFRENTAMIENTO FRONTAL
Cuando se divide la palabra ENFRENTAMIENTO se encuentra de inmediato la palabra FRENTE incorporada a ésta en su formación.
Como consecuencia de su formación, no se cree que convenga que se utilice ese FRONTAL junto con el vocablo estudiado. Ese empleo más bien parece “afrentoso”.
El “enfrentamiento” puede ser verbal, puede ser armado, puede ser más modesto, a “palos y pedradas”, como se ha leído muchas veces. Lo que se ha leído en otras ocasiones es lo del CHOQUE FRONTAL, en lugar del CHOQUE DE FRENTE. Cualquier “enfrentamiento” importante puede calificarse de FINAL o cualquier otra “genialidad”.
*ENLISTAR
Este verbo no estaba registrado en el Repertorio Oficial de la lengua hasta la edición del 2001. No se le había incluido porque se pensaba que no hacía falta. En muchas ocasiones lo usaban como sinónimo de ALISTAR, es decir, de RECLUTAR a una persona en las filas de las Fuerzas Armadas de un país.
En otras circunstancias se utilizaba el verbo para denotar otra acción. Hay que volver a examinar el verbo, porque de tanto usarlo lograron que la Academia le concediera entrada en el recinto de la lengua con el significado de COLOCAR EN UNA LISTA, de PONER EN UNA LISTA a alguien o algo. No solo consta ya con la significación recién mencionada, sino también con el valor de “reclutar”.
Los apasionados por la corrección de la lengua no pudieron cerrarle el paso al uso. Al registrar el verbo con los significados antes mencionados, la autoridad de la lengua hace constar que esos usos eran los acostumbrados en México.
En México hay una gran cantidad de hablantes de la lengua común. Por otra parte, es un país de una gran cultura, con una tradición literaria coherente, por lo tanto, merece el respeto del reconocimiento. Una vez más se cede el paso ante la fuerza del uso.
ENRIQUECERSE INJUSTAMENTE
No se piensa que se pueda juzgar en los tribunales a las personas que se enriquecen “injustamente”. Se cree que en el campo de lo justo y lo injusto lo que prevalece es más bien un sanción que conlleva una censura de orden moral.
Lo que la ley no tolera es que una persona se enriquezca ILEGALMENTE. Aquí es donde “la puerca retuerce el rabo”. Los tribunales sí se interesan en estos casos porque es un asunto de carácter legal.
En la vida diaria, no todo lo que es injusto es ilegal. Detrás de cada acto de enriquecimiento hay un acto de injusticia, diría un revolucionario. Son muchos los ejemplos de actos injustos que no pueden dar pie a una acción ante un tribunal. De hecho, los códigos sancionan únicamente los casos de enriquecimiento ilícito.
*EN UNA LLAMADA
“B. se enteró de la decisión del alto tribunal EN una llamada telefónica…”
En el caso del título de esta sección se usa la preposición EN, esto hace pensar que el sujeto se enteró de algo porque fue él quien llamó y se enteró. De hecho, este modo de redacción deja abierta la posibilidad de que se enterara de manera fortuita.
Por otra parte, si la persona que fue advertida de algo recibió la llamada de una tercera persona para, por ese medio enterarlo de algo, entonces debió usarse otro giro, que para el caso es MEDIANTE o POR MEDIO DE. De acuerdo con esta sugerencia la redacción terminaría de este modo: “B. se enteró de la decisión del alto tribunal POR MEDIO DE una llamada telefónica…”
Lo que se pretende demostrar con lo anterior es que algunas preposiciones cubren un terreno muy vasto, aunque al mismo tiempo conservan uno que le es muy específico de todas formas y que no se le debe disputar.
Lo que acaba de presentarse en el caso estudiado aquí acerca de EN, suele ocurrir también muy a menudo con la preposición POR. La última se la usa en demasía por influencia del inglés por lo que ha cobrado una importancia inusitada en épocas recientes.
INHUMANO – INFRAHUMANO
“Mientras los estudiantes… estudian… y en condiciones de vida INHUMANAS, miles de extranjeros estudian gratis…”
Aunque parezca inverosímil, hay quien parece que no entiende la diferencia de matiz que existe entre estas dos palabras del título. El texto era éste: “Mientras los estudiantes… estudian… y en condiciones de vida INHUMANAS, miles de extranjeros estudian gratis…”
INHUMANO es “falto de humanidad, CRUEL”. La definición es de la Academia, las mayúsculas son mías.
INFRAHUMANO es “inferior a lo que se considera propio de los humanos”. Esa es la definición de la Corporación de Madrid.
Se duda mucho de que las condiciones en las cuales estudian sean de CRUELDAD. Se inclina uno a pensar que esas condiciones están por debajo de lo que se considera bueno para los humanos, según las normas de vida humana.
La crueldad es de la vida real cuando el redactor confundió la gimnasia con la magnesia y sirvió un arroz con mango.
INICIARSE
“…los arrestados formaban parte de una compleja tela de araña que se INICIABA en…”
Este verbo cuando actúa como pronominal o reflexivo tiene significado específico. Véase: INICIAR es promover o comenzar una cosa. También es admitir a uno a la participación de una ceremonia o cosa secreta; dársela a conocer, descubrírsela.
En sentido figurado es instruir en cosas abstractas o muy profundas. En funciones de verbo pronominal es recibir órdenes u órdenes menores. Léase de nuevo el texto: “…los arrestados formaban parte de una compleja tela de araña que se INICIABA en…”
En principio, este es un verbo transitivo, o como se dice ahora, se le usa en construcciones transitivas, pues cuenta con objeto directo frente a los sintagmas que carecen de él. Ojalá los lectores no terminen confundidos con esta terminología lingüística.
En el caso citado se trata de una pandilla de malhechores, no se puede usar en sus funciones de verbo pronominal porque ese no es el valor que le reconoce la lengua, no sólo en la teoría, sino en la práctica también.
En el seno del Diccionario oficial de la lengua, el verbo sometido a estudio aquí sufrió algunos cambios. Se alteró el orden de las acepciones, y la primera acepción es la que se citó, cuando en ediciones anteriores, ésa ocupaba la penúltima posición.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir